te hace pensar, al menos por un rato, que nada más importa.
te da la impresión de que no ha existido ni va existir otra cosa.
y te ponés contenta.
todo es tan frágil, a pesar de que te sentís tan fuerte.
la gente llega y se va.
pensar que no habrá después nada más,
o convencerte de que va a durar para siempre (pero Para Siempre no existe).
Continue reading →


















